miércoles, 27 de mayo de 2009

Una tarifa eléctrica en la que tu dinero va sólo a renovables

El sistema de comercialización de la energía eléctrica en España va a cambiar a partir del 1 de julio. Por este motivo, es posible que hayas recibido con tu última factura una carta de tu empresa eléctrica habitual en la que te informa que debes cambiar de suministrador, junto a un listado de empresas a las que puedes llamar. ¿De qué va todo esto? Se supone que la apertura de la tarifa eléctrica al libre mercado debería impulsar una mayor competitividad entre las empresas y hacer aparecer nuevas ofertas. Pero lo cierto es que, a día de hoy, todavía son más las incógnitas que las respuestas. Eso sí, entre las comercializadoras de ese listado ya hay una que te ofrece pagar sólo por electricidad de origen renovable.

Hipótesis nº1:

Eres un consumidor doméstico al que lo único que preocupa es complicarse lo menos posible la vida, sin plantearse demasiadas preguntas, aunque el montante de la factura de la luz vaya probablemente a subir. En ese caso, bastará con no hacer nada: de forma automática el 1 de julio tu suministro será asumido por una de las cinco comercializadoras (Endesa, Iberdrola, Unión Fenosa, Hidrocantábrico o E.ON) designadas por el Gobierno para hacerte llegar la nueva "tarifa de último recurso" (TUR). Estas empresas están obligadas a llevar la electricidad a cualquier parte del territorio a un precio fijado por el Ministerio de Industria (aún sin definir), que lo revisará cada tres meses.

Hipótesis nº2:

Eres un consumidor doméstico que no sólo quiere saber qué hay detrás de todo esto, sino que además está muy preocupado por tener que pagar más por la electricidad. Entonces te interesa conocer los cambios introducidos por el Real Decreto-ley 6/2009, de 30 de abril. Este complicado texto introduce novedades muy variadas que afectan a lo que pagas por la luz, como dejar de cargar en la factura eléctrica costes de la gestión de los residuos radiactivos de las centrales nucleares o la creación de un registro de pre-asignación de retribución para limitar las instalaciones renovables. Pero, además, busca poner fin al sistema de tarifa eléctrica regulada que había funcionado hasta ahora, para continuar con el proceso de liberalización del sector eléctrico comenzado en 1997. La cuestión es que estas tarifas reguladas que pagan los consumidores en su factura de la luz están por debajo del coste real que hay que ingresar a las eléctricas, lo que genera un enorme déficit cuyo pago postergado en el tiempo no deja de crecer. Como se explica en las disposiciones generales del real decreto-ley, este desajuste supone un grave riesgo para la propia sostenibilidad del sistema eléctrico, además de inducir "a una creencia errónea respecto al precio de un bien escaso como es la energía, lo que no contribuye a favorecer el ahorro y a eficiencia energética". Por ello, se toman medidas para reducirlo de forma gradual hasta 2013. En la práctica, no desaparece la tarifa regulada para los consumidores con una potencia contratada menor o igual a 10 KW (es decir, los domésticos), pero sí que cambia bastante. Todo esto se traduce en la carta que han empezado a enviar algunas compañías eléctricas a sus clientes. En ella, se especifica que el consumidor puede optar a partir de julio por una compañía comercializadora "de tarifa último recurso" o por otra de mercado libre. El precio de la electricidad de "último recurso" seguirá estando marcado por el Gobierno, que esta vez fijará unos máximos. Y es previsible que esta tarifa sea más alta que la actual, dado que el objetivo es fomentar la competencia de las empresas en el libre mercado y aproximar el precio de la electricidad a su coste real (no se sabe aún cuánto se aproximará). ¿Y qué pasa con la gente que no puede afrontar hoy en día una subida de su recibo de la luz? Dentro de la opción de "último recurso", se prevé también la creación de una "tarifa social" específica para hogares con una potencia contratada menor de 3 KW, familias numerosas o con todos los miembros en paro, y jubilados con pensión mínima. Eso sí, estos colectivos podrán acogerse sin limitaciones a la tarifa social sólo durante un corto periodo de transición, hasta que el Ministerio de Industria tenga lista la normativa que ponga condiciones más concretas para pagar este precio reducido (se sabe que estas condiciones estarán ligadas a la renta per cápita familiar, pero no cuál será el límite).

Hipótesis nº3:

No perteneces a ninguno de los colectivos que pueden acogerse a la "tarifa social", pero buscas el precio que sea más económico. Se supone que debes escoger entre la tarifa "último recurso" y la opción de una empresa comercializadora del mercado libre. Aquí vuelven a estar todas las grandes compañías con otros nombres, pero también otras más pequeñas con larga tradición dentro de la distribución muy enfocadas a determinados ámbitos territoriales. Es el caso de Bassols Energía Comercial S.L, en Girona, o la centenaria Electra Energía S.A.U, en Castellón, donde nos aseguran que de partida esperan ofrecer una tarifa similar a la de "último recurso". "Ahora mismo el mercado está muy bajo por la situación económica y hay poco riesgo, incluso los precios pueden bajar", nos dicen en Bassols Energía Comercial. La Comisión Nacional de la Energía ofrece el listado completo de las estas comercializadoras (PDF). ¿Qué beneficios puede encontrar un cliente para pasarse al mercado libre? Ahora mismo, quizá no muchos. Pero, según nos explican en la CNE, se espera que vayan surgiendo tarifas más ventajosas que las de "último recurso" como consecuencia de la competencia entre las diferentes empresas. Así nos lo garantiza también una operadora en atención al cliente de Iberdrola:

—"La semana que viene la comercializadora de Iberdrola le informará de los precios de mercado libre, en cuanto a la tarifa de Iberdrola Comercialización de Último Recurso la tarifa se sabrá cuando la fije el Gobierno el 1 de julio, pero en principio la tarifa de libre mercado debe ser más ventajosa al competir con otras empresas".

En el caso concreto de las pymes (con más de 10 KW), estas deben escoger una de estas comercializadoras de libre mercado, pero pueden negociar mejores condiciones o ventajas para amortiguar la posible subida que experimentará la electricidad que consuman. Así ha ocurrido ya, por ejemplo, con los agricultores asociados a ASAJA y la compañía eléctrica Endesa, que han llegado a un acuerdo para obtener descuentos del 12% sobre los nuevos precios en la energía consumida para el riego.

Hipótesis nº4:

Eres un consumidor doméstico al que no sólo le preocupa lo que paga, sino también el impacto ambiental que tiene la electricidad que consume. En principio, el nuevo panorama no introduce cambios especialmente beneficiosos para las energías limpias, en todo caso lo contrario (por la creación de un registro para limitar las instalaciones). Sin embargo, si repasas la lista de comercializadoras de libre mercado verás que entre ellas figura Gesternova, S.A, la empresa de un grupo de productores de renovables independientes de la asociación (APPA). Como nos cuenta el gerente de Gesternova, Emili Rousaud, "vamos a ofrecer una tarifa equivalente a la de 'último recurso', pero sólo con electricidad de origen renovable. En la práctica, esto no supone en ningún caso que vaya a cambiar el origen de la electricidad que llegue a las casas, pues depende de las centrales más próximas, pero sí que permite a sus clientes que lo que paguen en sus facturas vaya sólo a empresas que inviertan en energías renovables (eólica, fotovoltaica y minihidráulica). De este modo, a final de año recibirán un certificado de la Comisión Nacional de la Energía (CNE) que garantice que se ha producido tanta energía renovable como por la que haya pagado. "Aquí no plantamos árboles, nuestros socios de APPA son productores renovables, que comunicarán a la CNE que su energía va a ser comercializada por Gesternova", detalla el gerente, "tenemos electricidad para unos 2,5 millones de familias, cuando lleguemos a este tope simplemente dejaremos de coger clientes, pero entonces iremos a reclamar al Gobierno que hay una parte de la sociedad que pide más energías limpias".

¿Y podrán mantener un precio competitivo? "Nuestra filosofía va a ser suministrar al mismo precio que la tarifa de último recurso, vamos a ser económicamente neutros", insiste Rousaud, que asegura que tampoco se van a dedicar a hacer telemarketing para captar a clientes. "Nuestro objetivo no es conseguir una cuota de mercado sino lograr una sociedad más sostenible".

1 comentario:

  1. Muchas gracias, Enrique. Bastante claro e instructivo. Tábata

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